En Pisos y Madera Piedrahita, nos enorgullecemos de ofrecer pisos de madera de la más alta calidad. Nuestro proceso de producción incluye varios pasos cruciales que aseguran que cada pieza de madera cumpla con los más altos estándares de calidad. Aquí te presentamos un recorrido detallado por nuestro meticuloso proceso de producción:

1. Adquisición de Madera de Primera Calidad: Seleccionamos la madera respetando la legislación ecuatoriana de preservación de flora y fauna. Garantizamos que no trabajamos con especies en peligro de extinción, asegurando así la sostenibilidad de nuestros recursos naturales para futuras generaciones.
2. Pre-secado Natural: La madera se seca al ambiente hasta obtener una humedad del 25% al 30%. Este paso es crucial para reducir al máximo las deformaciones, torceduras y rajaduras durante el secado en horno, garantizando una base sólida para los siguientes procesos.
   
3. Secado en Horno: Bajamos la humedad de la madera al 10% y luego la climatizamos en la obra para obtener un porcentaje que varía entre 12% y 14%. Este proceso no solo mejora la resistencia mecánica y la estabilidad dimensional de la madera, sino que también la hace más ligera y resistente a hongos y manchas.
   
4. Control de Calidad: Realizamos un mapeo exacto de toda la madera para pisos y recubrimientos, asegurando que cada lote cumpla con nuestros rigurosos estándares de calidad.
5. Maquinado: El proceso de moldurado o cepillado de las 4 caras de la madera garantiza un machihembrado perfecto. Trabajamos a una velocidad menor que el estándar internacional, lo que permite obtener pisos de mejor calidad, con menos desperdicio y un acabado superior.
   
6. Control de Calidad: Cada lote de producción tiene un número de identificación único que permite rastrear su origen y proceso. Verificamos que el machihembre sea exacto y que el tipo de madera producido sea el solicitado por el cliente.
   
7. Adaptación a la Humedad Natural: La madera debe adaptarse a la humedad natural de la vivienda para evitar problemas como el acucharamiento. Este tiempo de adaptación, que puede variar entre 20 y 45 días, es crucial para asegurar la durabilidad y estabilidad del piso instalado.

Este meticuloso proceso asegura que cada piso de madera que sale de nuestras instalaciones cumpla con los más altos estándares de calidad, proporcionando durabilidad, estética y confort a los hogares de nuestros clientes.